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Tensión en Oriente Medio.
El presidente israelí denunció a la policía que lo amenazaron de muerte. Es por condenar el crimen de un bebé palestino. Medidas de Netanyahu.
Un día después de liderar una multitudinaria marcha a favor de la tolerancia y en contra de los ataques de judíos extremistas a una familia palestina y a un desfile por el Orgullo Gay, el presidente de Israel, Reuven Rivlin, denunció ayer ante la policía haber recibido amenazas de muerte contra su persona.
El episodio puso en alerta a las autoridades de seguridad israelíes, mientras al mismo tiempo comenzó a circular en las redes sociales una imagen montada del mandatario con el tradicional pañuelo árabe en la cabeza y una leyenda que lo acusa de “traidor” y le advierte que “su memoria será olvidada”. Ayer, inumerables insultos y agresiones contra Rivlin fueron publicados en la página de Facebook de la Presidencia, en especial por haber declarado que sentía “vergüenza” por el reciente asesinato de un bebé palestino a manos de colonos israelíes radicales. Según la agencia EFE, algunos de los ataques contra el mandatario recibieron el apoyo de hasta 11.000 usuarios.
El extraordinario clima de tensión y alarma que se ha ido creando en estas horas en Israel tuvo otro pico culminante ayer a la mañana cuando palestinos y fuerzas de seguridad israelíes volvieron a chocar en la Explanada de las Mezquitas, en Jerusalén, aunque la situación se calmó pasado el mediodía. Se trata del tercer día de protestas en Gaza y Cisjordania.
Todo ocurrió poco antes de que el gobierno del premier conservador, Benjamin Netanyahu, sometido a fuertes presiones incluso de sus mismos votantes, anunció ayer una política de “mano dura” contra los extremistas judíos, tras la muerte de un bebé palestino en un incendio criminal y un ataque con cuchillo en el último desfile del Orgullo Gay en Jerusalén.
“Nuestra política hacia estos crímenes es de tolerancia cero”, anunció el premier. Netanyahu informó que el Estado aplicará la “detención administrativa”, una figura que autoriza a las fuerzas israelíes a detener a alguien en los territorios palestinos ocupados sin tener que explicar los motivos ni presentar evidencia ante el detenido o su abogado. Hasta ahora, esa figura sólo era usada contra la población palestina y nunca contra los colonos judíos que desde hace décadas se apropian de tierras consideradas internacionalmente como palestinas. Actualmente viven ilegalmente alrededor de medio millón de colonos judíos en los territorios ocupados de Cisjordania y Jerusalén este.
La expansión de las colonias ha contado con la protección implícita de las fuerzas militares israelíes. Y el gobierno no ha reprimido la mayoría de los ataques de extremistas contra la población palestina local. Analistas israelíes, organismos de derechos humanos y la dirigencia palestina señalan que la mayoría de esos ataques han quedado impunes y apuntan a ese hecho como una de las razones por las que esos delitos se siguen produciendo.
La tensión actual se disparó el viernes cuando un bebé palestino de 18 meses, Ali Dawabcheh, murió quemado y sus padres y hermano quedaron gravemente heridos tras un ataque de extremistas judíos, que lanzaron cócteles molotov al interior de la vivienda cerca de Naplusa, en Cisjordania. El jueves, un judío ultraortodoxo reincidente apuñaló a seis participantes del desfile del Orgullo Gay en Jerusalén. Ayer murió una de las apuñaladas (Ver aparte). Sin embargo, tres días después del ataque, ningún sospechoso ha sido detenido.
Según denunció la ONG israelí Yesh Din, la probabilidad de que los autores de los ataques sean sometidos a la justicia es inferior al 2%. Sostuvo que el 85,3% de las denuncias de palestinos contra colonos son archivadas. Al mismo tiempo, las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina no están autorizadas, según las reglas establecidas por los Acuerdos de Oslo, a detener o interferir con los ciudadanos israelíes que viven en Cisjordania. Yesh Din recordó que se han producido uno 11.000 ataques en los últimos 10 años.
En una columna en el diario Jerusalen Post, el especialista en inteligencia Yossi Melman no encontró ninguna razón para la ausencia de detenidos por el crimen del bebé. “Es incomprensible que un Estado que logra desmontar el terrorismo árabe y palestino, que constituye un modelo copiado por numerosas agencias de seguridad, encuentre difícil enfrentarse a unos pocos cientos de terroristas y sus cómplices”, concluyó.
Fuente: clarin.com / Agencias AFP, EFE y DPA
